Cada paso comienza desde los pies, que es el origen de la marcha humana. Como dice el refrán, un viaje de mil millas comienza con un solo paso.
El número de huesos en los pies es una cuarta parte del número total de huesos en el cuerpo humano y es la principal fuerza de las extremidades.

"Si el pie no está correcto, el mecanismo de protección del cuerpo hará que las articulaciones del cuerpo compensen. El tobillo, la rodilla, la cadera, la pelvis y la columna vertebral, desde abajo hacia arriba, se ven involucradas en la compensación.
Las articulaciones del cuerpo humano están interconectadas, y si hay un problema con el pie, el cuerpo estará torcido, similar a la base inestable de un edificio, lo cual provoca que el edificio colapse.
Las anomalías en el pie son una causa importante de la compensación en las extremidades y, por lo tanto, de la marcha anormal."

"El movimiento anormal del pie se transmite hacia arriba a través de una serie de cambios biomecánicos y, bajo el efecto continuo de la marcha anormal, afecta al esqueleto, las articulaciones y los músculos de todo el cuerpo.
Corregir la marcha deficiente, comenzando desde la fuente de la marcha, requiere una intervención efectiva combinada con ejercicio muscular para mejorar gradualmente la condición de la marcha."